De felicidad y límites
La felicidad es esencialmente sencilla.
Buscamos complicarla
por miedo a que no baste.
Buscamos complicarla
por miedo a que no baste.
enviado por Carz 2:05 a. m.
Todos los textos y fotografías (salvo indicación en contra) son originales de Carz
22 Comments:
Y tantas veces lo que hace feliz a uno no hace feliz al otro.
Y se complica.
Y el miedo todo lo abarca.
Otras veces la rehuimos para no sentirnos peor cuando nos deje.
Abrazos
Ay sí,porque a veces resulta todo tan complicado, que sospechamos de algo que no lo es.
Besitos
Cualquiera,
El miedo es una fuerza poderosa que tiene la virtud de componer nuestra visión de lo que nos rodea alterándonos la percepción.
A menudo, si conseguimos sobreponernos a él, vemos que en realidad su función era la de alejarnos de lo que en realidad amamos, que es esencialmente sencillo.
Ybris,
Ponerse la venda antes de la herida sólo consigue que se ensucie el vendaje y que, cuando se produzca la herida, se infecte.
Princess,
Yo creo que el orden es el contrario: no es que resulta complicado y sospechamos, sino que sospechamos y se complica.
Nos sobreponemos al miedo, nos acercamos a lo que amamos sencillamente y la realidad vuelve a mostrar que el otro necesita cosas que no podemos darle, o lo que nos muestra o da, nuevamente hiere.
Cualquiera,
Quizá debamos aprender a que no nos hiera lo que el otro necesita.
Probablemente la herida provenga de un miedo infundado, como suele ocurrir si hay amor de por medio: nadie quiere herir a quien ama, sencillamente.
"Quizá debamos aprender a que no nos hiera lo que el otro necesita.??"
Creo que el amor maduro nada tiene que ver con eso.
De estar enamorado, solo eso basta.
Es posible que la felicidad sea sencilla pero nosotros no lo somos, y no creo que sea sólo por miedo sino por muchos más esquemas escondidos aprendidos desde niños, desde no permitirnos ser felices, no creernos dignos, no valorar la felicidad cuando la tenemos, etc, un abrazo
Cualquiera,
Quizás tengas razón, pero yo no llego a verlo.
En cambio si estoy de acuerdo en que basta con estar enamorado.
Leuma,
Creo que somos sencillos pero nos enredamos buscando un futuro que siempre es incierto.
La visión de la vida de Carver después de haber estado a un paso de la muerte (que le sobrevino sólo diez años después, lo que consideró siempre una propina) basada en el "Ahora" es la que nos haría momentáneamente (y por tanto, también de forma permanente) si no felices, al menos no infelices.
Un abrazo.
Ayns...aquí me explayaría tanto...que ni mordiendo los labios me omitiría...así que opto por ese "basta" que para mi es insuficiente e invalida todo lo que no escribí.
Anda que tú!!
Olimpia.
Interesante tu blog. Interesante este post y los comentarios también.
Paticularmente pienso que entre felicidad y límites todo depende de la exigencia individual. Por eso vemos a veces la felicidad como algo inalcanzable. Somos eternos inconformistas. No nos detenemos a disfrutar lo realizado, lo conseguido ... En fín, el tema dá para mucho.
Saludos
Jejo
Olimpia,
Morderse los labios es síntoma de que uno admite la posibilidad de estar equivocado, y esa es una certeza (la posibilidad, digo). También podría ser síntoma de sumisión o cobardía, pero ése no es tu caso (acaso pudiera ser también respeto o amistad, que sí me cuadra que te quepan).
Todo lo no escrito pertenece al no escribiente, queda a su recaudo, y él conocerá sus motivos.
Jejo,
Estoy de acuerdo contigo en que la felicidad es una cuestión de exigencia individual, pero su inalcanzabilidad (al menos momentánea) es un mero postulado.
Personalmente, puedo afirmar que la he conocido, que he dormido a su lado mientras contemplaba su objeto y su causa.
Saludos, y bienvenido.
Hola Carz:
para mí la felicidad es como aquello que encuentras al mirar a través de un microscopio. Cuando te alejas de él y retornas al macrotamaño de lo que te rodea, en tí han quedado integradas las formas que viste, aunque no las veas.
Dicho de otra forma, la felicidad es como una infección de paz, que deja secuelas o que produce recidivas a lo largo de toda la vida.
Te mando un abrazo paisano, desde la Enterprise.
Hipatia,
como casi siempre me dejas pensando en lo que dices. Sí la felicidad puede ser una infección de paz, pequeñas partículas de paz, que se multiplican inesperadamente hasta invadirnos y lo más esperanzador de todo, que recidivan.
Pero también la paz pudiera ser una infección de felicidad, o al menos eso creo.
Mi abrazo.
sabes que mientras tú piensas este tipo de cosas hay montón de gente por ahí plantándose ante el tomate y sus secuaces del corazón con la cabeza puesta en la vida de los otros?
Estas cosas te salen así, sin más? De repente te despiertas y lanzas al mundo una certeza como un templo, o una idea como una catedral, o qué se yo, una visión repentina, una luz de esas que nacen de pronto.
No sé, me reitero: Me alegro de haberte pillado por el blog de Ella.
Un beso
Sobra decir que esa idea que has puesto es genial y me ha encantado, ¿no?
Lau,
No sobra nada de lo que me dices: uno juega a ser un eremita, muchas veces por haber sufrido decepciones, pero sé algo más de encuentros que de pérdidas, y quiero sonreír, lo necesito, y tú consigues que lo haga.
Por otra parte ignoro el porceso por el que escribo, sólo sé que es algo que no controlo, no tengo oficio, sólo entrañas.
Otro beso sonriente para ti.
jejej, pues lo dicho, lo redicho y lo que posiblemente diré bastante en el futuro: Estoy orgullosa de tus entrañas.
Eres un artista. Debería estar todo esto publicado debidamente.
En papel las entrañas se tornan sólidas y verdaderas, por aquí es como si se volcaran en una ventana inaccesible.
Es que me encantan los libros, el tacto, el paso de las páginas. Es una bobería, pero leer cosas como ésta en papel es como hacer al alma palpable, y eso debe ser una maravilla.
Un besazo enorme
Me he enamorado de tus letras, chico, de tu blog, jejeje.
Me tendrás aquí como la garrapata pesada y perseverante.
Un besazo
por cierto, en el comentario anterior te hablaba del tomate y sus secuaces del corazón. Dí por hecho que sabías de qué hablaba sin saber de dónde eras. Ahora que creo que eres argentino o "de por ahí" te digo que el tomate es un programa terrible del corazón aquí en españa, que por cierto tiene muchísima audiencia y que se dedica a navegar por las intimidades de pseudofamosos de pacotilla para que todos nos enteremos de aspectos de la vida de los mismos que no deberían interesar a nadie. Son brutos, maleducados y despectivos, en mi opinión.
Besos
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