De espadas y medidas
Enarbolar la espada,
el estandarte,
para germinar un fruto de cenizas:
permitidme que me declare prófugo
de mí y de mi ahora.
La memoria aquilatada en el deseo
te devuelve en toda tu belleza:
esa parte de ti se queda a salvo
de todas las mareas y reproches.
Eres tuya por principio,
pero algo de ti tengo guardado
en esta sensación que es dolor
pero no duele,
porque pesa mucho más
que este presente
la sensación de amar
-y ser amado-
sin medida.
el estandarte,
para germinar un fruto de cenizas:
permitidme que me declare prófugo
de mí y de mi ahora.
La memoria aquilatada en el deseo
te devuelve en toda tu belleza:
esa parte de ti se queda a salvo
de todas las mareas y reproches.
Eres tuya por principio,
pero algo de ti tengo guardado
en esta sensación que es dolor
pero no duele,
porque pesa mucho más
que este presente
la sensación de amar
-y ser amado-
sin medida.
enviado por Carz 4:30 a. m.
10 Comments:
"La sensación de amar - y ser amado- sin medida", debe doler no poder disfrutar juntos día a día de ese amor, sí, debe ser como espadas que se clavan, Un abrazo
Pero que fortuna ser capaz de valorar más lo tenido que lo perdido.
Un beso
Carz...como yo desconozco las palabras que no salen de mi boca, sólo puedo "usar" las mías y no otras para decirte que "no tiene caso engañar la piel con vestiduras de olvidos, y perjurar medidas y pesos que fueron ponderables"...pudo, podría-is....pero...¿germinar?.
De nuevo tus letras son "romadizo" que ciegan la belleza de tus versos.
Sin dolor de tiempos te dejo mi beso sin truco.
Olimpia.
G,
como tú bien dices de perdidos al río. La fortuna sería no perder lo amado, pero una vez en el río no concibo lastrarme con más plomo.
Varias veces me hubiese gustado comentarte, pero al parecer, prefieres que nadie lo haga.
En todo caso, tus comentarios aquí son bienvenidos.
Un abrazo.
Olimpia,
Dicen que cada persona es un mundo, pero cuando se trata de dos, al menos son ocho.
No me preocupa que mis versos sean o no bellos, sólo que cumplan su función de dotar de una levedad moméntánea al peso constante que supone pensar que lo absurdo puede llegar a tener preponderancia sobre el sencillo (pocas veces) acto de amar.
Un abrazo.
Gracias Carz, ayer después de comentar me quedé pensando que siempre digo lo mismo, o al menos tengo esa sensación. Será que yo no soy capaz de hacer eso que tanta admiración me produce. Pero es cuestión de tiempo y yo también podré, seguro.
¿Por qué dices eso de los comentarios? Siéntete con libertad para hacer y decir lo que te apetezca en mi blog, porque eso es lo que yo prefiero.
Un beso
g.
Yo también tengo la sensación de repetirme demasiado, pero en el fondo sólo escribo de lo que necesito escribir, así que no caben las lamentaciones en mi caso.
Yo utilizo FireFox como navegador y, desde él, no son visibles los comentarios en tu blog, por eso pensé que los tenías deshabilitados. A raíz de tu segundo comentario conecté con el IE Explorer y vi que sí que aceptabas comentarios, a eso me refería.
Un abrazo.
Leuma,
Creo que es un dolor viejo que conoces bien. Yo alguna vez me quedo en blanco y, literalmente, las palabras y las situaciones carecen de sentido, sé cómo suenan pero no sé lo que significan, sé cuáles son, pero no encuentro sus motivos o su sentido... esta es una de esas situaciones inverosímiles por su absurdo.
Un abrazo.
sinceramente: Tenía muchísimas ganas de encontrar un blog cmoo el tuyo. Qué bien, pero qué bien
Lau,
si sigues así me vas a sonrojar (que por otra parte me iba haciendo falta)
Un abrazo.
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